Putin ordena la retirada de sus tropas en la frontera con Ucrania.


El presidente de Rusia, Vladímir Putin, ordenó al ministro de Defensa, Serguéi Shoigú, que hiciera “regresar a sus emplazamientos habituales” a las “tropas participantes en maniobras en la frontera con Ucrania”, según informó el servicio de prensa del Kremlin. El líder ruso participó en una reunión del Consejo de Seguridad en la localidad de Sochi, en el Mar Negro, antes de partir hacia China en visita oficial. Las maniobras se realizaban en polígonos de la región de Rostov, Bélgorod y Briansk, según la información del Kremlin. Esta no es la primera vez que los dirigentes rusos afirman haber retirado las tropas movilizadas en su frontera occidental que han mantenido en tensión a Ucrania. Putin no informó sobre cuáles son los emplazamientos habituales de las tropas que se retiran, por lo que, sin información suplementaria, es imposible valorar sus palabras. Sin embargo, el secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, ha negado este lunes en Bruselas que Rusia esté llevando a cabo el repliegue de sus soldados. “Creo que es la tercera declaración de Putin al respecto y no hemos visto ninguna prueba de que los rusos hayan empezado a retirar sus tropas”, ha apuntado el máximo dirigente de la organización militar al tiempo que reconocía la “importancia” del gesto si llegara a darse. 

“Sería el primero en dar la bienvenida y aplaudir un repliegue que ayudaría a la desescalada en la crisis de Ucrania”, ha señalado con rictus serio. Rasmussen ha aprovechado su comparecencia ante los medios para recordar que la agresión de Rusia en Ucrania ha generado una nueva situación de seguridad en Europa, menos predecible y más peligrosa, lo que tiene implicaciones ahora y en el futuro para la OTAN, informa Ignacio Fariza. Por lo menos en tres ocasiones en los últimos tres meses, Rusia ha informado de retirada de tropas de su frontera occidental. El 4 de marzo, Putin dio orden de regresar a sus emplazamientos permanentes a los participantes de en maniobras en la parte occidental del país, según informó entonces el secretario de Prensa del Kremlin, Dmitri Peskov, a la agencia Interfax. El 31 de marzo, en una conversación telefónica con la canciller alemana Angela Merkel, Putin informó de una retirada parcial de la frontera oriental con Ucrania, según un portavoz de la cancillería alemana. Posteriormente el jefe de la diplomacia rusa, Sergúei Lavrov, precisó que su presidente había informado del fin de unas maniobras en Rostov y que uno de los batallones participantes había vuelto a su emplazamiento en Samara, una región situada en el Volga al Este de Moscú. 

Rusia no está sujeta a ninguna limitación en lo que se refiere a los movimientos de tropas en su territorio, subrayó entonces el ministro. El pasado 7 de mayo, tras una conversación con el presidente de turno de la OSCE, el suizo Didier Burkhalter, Putin volvió a “informar” sobre la retirada de tropas de la frontera. La OTAN no confirmó la información y posteriormente el departamento de Estado norteamericano publicó fotos de satélite, según las cuales las unidades desplazadas estaban todavía en la frontera. Según la información facilitada el lunes por Kremlin, los soldados y oficiales que han participado en las maniobras en Rostov, Bélgorod y Briansk continuarán su “preparación militar en los polígonos situados en los lugares próximos a sus emplazamientos habituales”. Putin tratará sobre la situación en Ucrania con el secretario general de la ONU en China, donde participara en la Conferencia de Seguridad y Colaboración en Asia que se celebra en Shanjái, según la agencia Itar Tass. El presidente ruso acogió positivamente los contactos entre Kiev y los partidarios de la federalización del país con el fin, según dijo, de “establecer un diálogo directo en el que deben participar todas las partes interesadas”, según el servicio de prensa del Kremlin. 

Putin insistió en que Ucrania debe interrumpir su operación de castigo (operación contraterrorista en la terminología ucraniana) y retirar sus tropas con el fin de resolver los problemas acumulados de forma pacífica. Al término de una reunión con su colega de Eslovaquia, el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov manifestó a favor de una reflexión profunda sobre las relaciones de Rusia con la UE y la OTAN e insistió en que hay que “entender mejor donde estamos, donde coincidimos y en qué discrepamos” para regresar a los marcos de referencia institucional de estas relaciones. Lavrov calificó las mesas redondas de diálogo iniciadas por Kiev, que calificó como un paso en la dirección correcta aunque limitado, e insistió en que el debate sobre la reforma de la constitución ucraniana debe reflejarse también en esas mesas redondas. El ministro insistió en que es necesaria una investigación de los enfrentamientos en Odessa, el 2 de mayo pasado, y los disturbios anteriores en la plaza de la Independencia de Kiev.

Fuente: http://internacional.elpais.com/

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