Embraer negocia la exportación de 32 aviones KC-390 a Europa y Sudamérica.


Embraer da los primero pasos para comenzar la exportación del avión KC-390. La empresa brasileña mantiene negociaciones con diferentes países de América y Europa que han mostrado su interés en hacerse con los servicios de la joya de la aviación militar brasileña. Concretamente, los países interesados en la compra del nuevo KC-390 son Chile, que necesita seis unidades; Colombia, donde requieren 12; otros seis que pide Argentina; seis más para Portugal y dos para la República Checa. En total suman 32 unidades. Las expectativas de Embraer pasan porque las exportaciones del KC-390 aporten unos 20.000 millones de dólares a la empresa. A estas exportaciones habría que sumar las ventas que ya se han producido dentro de las fronteras brasileñas, cuyo Gobierno firmó un contrato en el año 2009 para la adquisición de 28 aparatos y dos prototipos. 

El montante total del contrato asciende a 3.000 millones de dólares y la entrega deberá producirse en siete años a contar desde la rúbrica del acuerdo. Según la FAB, la entrega de las primeras unidades de la serie debería producirse en 2016. Conocido como el sucesor del veterano Lockheed C-130 Hércules en sus muchas variantes, el KC-390 combina tecnologías y capacidades multitarea avanzada en una caja compacta, robusta y capaz de proporcionar a sus operadores un rendimiento superlativo, con la velocidad media más alta y sin igual en cuestiones como la agilidad de carga y descarga. El KC-390 tiene capacidad para embarcar blindados Mowag Piraña 8x8 o Guaraní VBTP-MR 6x6, sin necesidad de desmontar los componentes complejos. También admite el transporte de helicópteros de medio tamaño con los rotores desmontados y vehículos de infantería, así com palets militares estándar y otros tipos de carga. 

El suelo está equipado con rodillos, puntos de anclaje reforzados y ofrece accesorios para diversas configuraciones y equipos. El compartimento de carga tiene una anchura de 3,35 metros, una altura de 2,94 metros en su parte más baja y 3,20 en la más alta y su longitud es de 12,68 metros en planta y de 18,54 en techo. El KC-390 puede transportar hasta 80 soldados equipados o 64 paracaidistas o se puede subir a un blindado hasta 22 toneladas o tres vehículos siete toneladas cada uno. Es el avión más grande que se haya diseñado en Brasil, casi un 50 por ciento más pesado que el Embraer E-Jet 190/195. Su rendimiento y su capacidad de carga superan la del C-130 Hércules. Además, el KC-390 es capaz de aterrizar en lugares inhóspitos, como el Amazonas y la Antártida, o en zonas de conflicto. Sus características permiten el desembarco inmediato de tropas y vehículos de combate y es capaz de repostar en pleno vuelo. 

Un proyecto clave para Brasil 
De acuerdo con la Estrategia Nacional de Defensa (END), una de las premisas fundamentales del proyecto es dar prioridad, cuando sea posible, a la industria nacional en la producción de componentes para el KC-390. La intención es que todo se fabrique en Brasil, desde el blindaje, al equipamiento de apoyo en tierra pasando por escaleras, la cocina o la estructura necesaria para la línea de montaje. 

La expectativa, según la FAB, es que la producción del KC-390 genee 12.600 puestos de trabajo en el país. El avión utiliza, entre muchos artículos importados, equipos de aviónica de última generación, como sistemas de control de vuelo eléctricos (fly-by-wire), modernos sistemas de misión integral, incluyendo el cálculo preciso de punto de lanzamiento de carga (CARP), sistemas de auto-protección (MSF), que garantizan la capacidad de reconocimiento del entorno y la supervivencia en ambientes hostiles; contramedidas para frustrar misiles infrarrojos que utilizan una fibra óptica basada láser de última generación, capaz de generar un haz de energía para inhibir misiles guiados por infrarrojos pocos kilómetros antes de que amenacen al KC-390 (DIRCM); pantalla doble (HUD) para proporcionar información a los dos pilotos durante todas las fases del vuelo. 

Incluso posee una cámara a color instalada al nivel del ojo del piloto y superpuesta con la información generada por la pantalla (HUD) para fines de análisis post-misión. Los motores que utiliza, turboventilador-E5 IAE V2500, son utilizados en aeronaves de la aviación comercial internacional, cuentan con una amplia red mundial de servicio y disfrutar de una alta fiabilidad y madurez del diseño, además de ser unos reactores económicos y relativamente fácil de mantener. (Jesús.R.G.)


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