Aviones Galaxy y C-17 norteamericanos están trasladando todos los días materiales a la base de Rota para montar el escudo antimisiles. De tres vuelos semanales han pasado a hasta cinco al día.


Desde hace semanas, la base militar norteamericana de Rota ha sido testigo de cómo han ido aumentando las operaciones de la fuerza aérea estadounidense. Decenas de aviones de transporte han estado aterrizando en la pista roteña. Ya están llegando los primeros equipos informáticos y sistemas electrónicos destinados al escudo antimisiles de la OTAN.

“Hay vuelos a diario, incluso un día se han contabilizado cinco” indican a El Confidencial Digital personal militar destinado en la base española de Rota, que han visto como se multiplicaba la actividad en las instalaciones norteamericanas colindantes. Este movimiento viene detectándose desde hace algo más de un mes. Hasta entonces, los vuelos se reducían a “uno cada dos días” aseguran estas fuentes, y casi todos correspondían a escalas de abastecimiento de los enormes aviones de transporte militar pesado C5 Galaxy y C17 Globemaster de camino a los teatros de operaciones en Oriente Medio y Asia.
 

ECD ha preguntado a fuentes militares bien situadas por la razón de ser de estos vuelos, y han confirmado que se trata de “preparativos técnicos y logísticos” de cara a la próxima instalación del sistema de protección antimisiles de la OTAN, que tendrá en Rota la parte principal de su componente marítimo. En concreto, según estas fuentes, lo que está llegando a Rota es parte del equipamiento informático y material electrónico necesario para la puesta en marcha y mantenimiento de los sistemas de radar, que llegarán a Cádiz a bordo de los destructores y fragatas que desplegará la U.S.Navy a lo largo de 2012 y 2013.

Este confidencial ha tratado de obtener más detalles sobre los planes y plazos de instalación del escudo antimisiles, pero esos datos, que obran en manos del alto mando militar español, han sido calificados de “materia reservada sensible para la seguridad del Estado”. Actualmente viven en la base de Rota unos 2.000 ciudadanos estadounidenses, entre militares, civiles y sus familias, y se espera la llegada de 1.100 nuevos militares para reforzar el operativo antimisiles.

Fuente: http://elconfidencialdigital.com

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