El repliegue de Afganistán, un reto logístico.


El repliegue de Afganistán es un problema logístico fundamental, que se puede convertir en un importante problema económico por las diferencias de coste que puede haber según las opciones que se utilicen para el retorno de los materiales, por lo que será necesaria una gestión eficaz, según el general Miguel Ángel Ballesteros, director del Instituto Español de Estudios Estratégicos (IEEE).

"Hay que replegar más de 100.000 contenedores. Y no es lo mismo que el traslado de un container cueste 5 o cueste 6, porque es un gran volumen lo que hay que trasladar", dijo Ballestero, que resumió las nuevas capacidades de la defensa desde la perspectiva europea en la conferencia que abrió la primera jornada del curso de verano "La industria de Defensa en un escenario de crisis económica". El general intentó tratar de responder a la pregunta de hacia dónde va Europa y qué tipo de capacidades necesita. "Ahora estamos, en gran medida, desorientados", dijo Benallesteros que señaló la prospectiva en este tema es complicada. "El conflicto de Afganistán ha puesto de moda los programas de los UAV, y ahora todo el mundo quiere UAV".

""Pooling and sharing" parece algo nuevo, pero el desarrollo del sistema Helios ya lo fue", dijo el general, que explicó que cada país paga una parte del sistema y, en función de la cuota aportada, tiene la posibilidad de utilizar el programa desarrollado. "En el pooling and sharing, si estás desde el principio adquieres parte importante de ese programa. Hay que posicionarse pronto, porque si no, te quedas con la parte del programa que tiene tecnología", resumió. La estrategia de la OTAN de "Smart Defence" está enlazando con el "pooling and sharing" de la Unión Europea, porque a Estados Unidos le interesa. Europa está en una mala situación, y Estados Unidos está intentando que "Europa se moje".

Estados Unidos se aleja de Europa
"Quiero que os hagáis mayores de una vez", dijo, es el pensamiento actual de Estados Unidos, que ha trasladado su zona de interés hacia Asia -Pacífico. "Y eso significa que los países tienen que aportar más", añadió el general. La solución en la OTAN se llama Smart Defence, que ya ha tenido alguna experiencia previa, como el programa de los AWACS. Para el general, el problema es concretar si esos sistemas compartidos se podrían utilizar en caso de hacer frente a amenazas no compartidas. "España es uno de los países más amenazados: en el Sahel, los grupos terroristas han encontrado un refugio mejor que Waziristán o el valle del Swat. Y estos grupos difunden cada semana comunicados, a través de una organización que se llama, curiosamente, Al-Andalus". 

Los dos líderes europeos, Francia y Gran Bretaña, están ahorrando y haciendo inversiones conjuntas. Y, unas de las principales razones, según Ballesteros, es que consideran que los demás países "no son serios". "Gran Bretaña y Francia están haciendo una cooperación estructurada permanente, algo que no es malo para la UE, si abren la puerta para que entren otros países de la UE", reseñó el general, que apuntó que Alemania es un país pasivo, que se apoya en la Alianza Atlántica pero no tiene gran protagonismo, como ocurrió en la crisis de Libia. "No es socio fundador de OTAN, por lo que su opinión pública no ha evolucionado como las de los demás países que firmaron el Tratado de Washington en abril de 1949"

Como ejemplo del poco entendimiento europeo, Ballesteros utilizó la creación, en 1952, de la Comunidad Europea de Defensa, formada por Francia, Gran Bretaña, Alemania, Bélgica, Holanda, Luxemburgo e Italia. La estructura no se consolidó porque la Asamblea Francesa denegó el tratado, lo que demuestra que, "cuando la cuestión es ceder soberanía, Francia se acaba oponiendo".

Fuente: http://www.revistatenea.es

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