Insurgentes sirios notificaron que se habían adueñado de la base militar N 38 que se ubica entre Damasco y Ammán, capital de Jordania y publicaron imágenes supuestamente del cadáver ensangrentado del comandante de la base.
Pese que hasta el momento esta información no ha sido confirmada. La prensa internacional coincide en que los combates en el sur de Siria adquieren un carácter más violento, debido a que desde esta zona la oposición siria armada intenta abastecerse de alimentos y armas para atacar Damasco.
Fuente: http://spanish.ruvr.ru/
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