¿Está lanzando EE.UU. una nueva guerra armamentista?

El Congreso estadounidense busca a toda costa aumentar el gasto militar, pese a la oposición de Obama. Los expertos coinciden en que eso significa que Washington ha iniciado la carrera armamentista para hacer frente a lo que la Casa Blanca califica como amenazas. La Cámara de Representantes del Congreso de EE.UU. aprobó el proyecto de presupuesto que prevé la reducción del gasto social en los próximos diez años, mientras que planea aumentar el gasto militar en 40.000 millones de dólares en el año fiscal 2016. Es posible que en un futuro próximo el Senado -la Cámara alta del Congreso- vote sobre el proyecto de presupuesto y también apoye el documento. 

El Congreso estadounidense busca a toda costa aumentar el gasto militar, pese a la oposición de Obama. Los expertos coinciden en que eso significa que Washington ha iniciado la carrera armamentista para hacer frente a lo que la Casa Blanca califica como amenazas. La Cámara de Representantes del Congreso de EE.UU. aprobó el proyecto de presupuesto que prevé la reducción del gasto social en los próximos diez años, mientras que planea aumentar el gasto militar en 40.000 millones de dólares en el año fiscal 2016. Es posible que en un futuro próximo el Senado -la Cámara alta del Congreso- vote sobre el proyecto de presupuesto y también apoye el documento. El problema reside en que Obama no puede pasar por alto las opiniones de los parlamentarios. Así, en el proyecto de presupuesto aparece una enmienda que permite al Senado limitar los fondos para el programa Obamacare. 

Como resultado, Obama puede ceder ante los republicanos, incluso en la cuestión del aumento en el gasto militar, opina un columnista del portal ruso 'Svobodnaia Pressa'. De hecho, en Estados Unidos poco a poco comienza la nueva carrera armamentista, advierte la publicación. Cabe recordar que el presupuesto militar actual, es decir para 2015, prevé la asignación de cerca de 64.000 millones de dólares en operaciones militares extranjeras. Además, se prevé 5.000 millones de dólares para las operaciones contra el Estado Islámico. "En este contexto, 40.000 millones de dólares adicionales representan una cantidad impresionante que puede ser destinada, por ejemplo, a la lucha contra las nuevas amenazas que el mismo Obama ha expresado en varias ocasiones", señala el artículo y recuerda cómo el presidente estadounidense en ese sentido atacaba a Rusia, culpándola de la crisis en Ucrania. 

"Esto significa que en el caso de aprobar un presupuesto militarizado, EE.UU. aumentará la actividad militar en Oriente Medio, Europa del Este y Ucrania. Y es poco probable que Rusia deje las acciones de los estadounidenses sin respuesta", según el autor del artículo. El director del Centro de Coyuntura Estratégica ruso, Iván Konoválov, opina que "en el contexto del total de los gastos militares de Estados Unidos, ese aumento del presupuesto no es tan grande. Pero si 40.000 millones de dólares se destinarán a varios programas separados, eso sería una financiación seria". "Por ejemplo, la Casa Blanca puede destinar una parte de estos fondos para luchar contra el Estado Islámico. Es un escenario bastante probable. A pesar de los ataques contra Rusia, Estados Unidos es consciente de que el principal peligro proviene desde Oriente Medio", prosigue Konoválov. (Jesús.R.G.)


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